Consultora especializada en temas de defensa de derechos del consumdor

Consultora especializada en temas de defensa de derechos del consumdor
Consultoría sobre relaciones de consumo

viernes, 4 de diciembre de 2009

Legislación Ambiental

En una nueva edición nos estamos encontrando con el fin de poder brindar siempre mejores soluciones y atendiendo las problemáticas particulares de cada consumidor. En los últimos años, el desarrollo de la legislación medioambiental en países como el nuestro, ha despertado un creciente interés en estimar los cambios en el bienestar de los individuos ante cambios en las provisiones de bienes naturales como el medio ambiente, esto es, el efecto de una modificación por ejemplo en la calidad del aire, o en la calidad de zonas naturales como parques, lagos, paisajes, etc. Por eso es que los ciudadanos en su carácter de consumidores no sólo deben exigir el derecho a vivir en un medio ambiente sano y saludable, sino también asumir las responsabilidades que les corresponden para evitar que el consumo presente comprometa las generaciones futuras. En 1999 la Comisión sobre el Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas aprobó la ampliación de las Directrices para la Protección al consumidor y los derechos y deberes que éste tiene frente a la actual situación de deterioro ambiental. Así en el punto III, letra G, parráfo 43, de las Directrices se lee “…Corresponde a los consumidores informados una función esencial en la promoción de modalidades de consumo que pueden sustentarse desde el punto de vista económico, social y ambiental, incluso influyendo en los productores con sus decisiones…Las organizaciones… de consumidores tiene la responsabilidad de promover la participación y el debate público en lo que respecta al consumo sostenible, informar a los consumidores y trabajar con los gobiernos y las empresas con miras a promover modalidades sostenibles de consumo”.Según la Ley de Defensa de los Consumidores, dentro de los derechos del consumidor están la protección de la salud y seguridad en el consumo de bienes y servicios, un trato equitativo y la preservación de un medio ambiente adecuado que garantice la preservación y desarrollo de los recursos naturales. Sin embargo, generalmente consumimos bienes y servicios que afectan la salud y el medio ambiente, como el transporte público urbano e interurbano, debido a las emanaciones de dióxido de carbono y ruido, a las verduras contaminadas con plaguicidas; o las embarcaciones que contaminan los ríos y mares, inclusive con el ruido que afecta a la fauna acuática o mismo ruidos que afectan a la población. Y no sólo deberíamos velar por que el ambiente y los productos sean saludables, sino que se utilicen de forma racional y equitativa. Con el abuso de los recursos por parte de unos pocos, a la mayoría le queda casi nada para consumir, como en el caso del agua. Mientras unos tienen pozos, tanques, piscinas y playas; otros deben comprar el balde de agua, además de pagar los recibos por el servicio que no reciben. Mientras unos pasan horas refrescándose bajo la ducha; otros pasan horas caminando o haciendo fila bajo el sol para conseguir un poco de agua. Habría que normar una cantidad máxima de su consumo en piscinas, empresas industriales, agrícolas y de servicios, así se verían obligados a ahorrar, por ejemplo, en las gasolineras, evitando el lavado de carros con mangueras, que además hacen un ruido ensordecedor,y también controlar donde distribuyen supergas que no solo son ruidos ensordecedores sino también un escape de gas que llega momentos que es imposible respirar. Muchos de estos que se encuentran al lado de casas habitadas, sin cumplir la reglamentación vigente, y, hasta llegando a dejar 52 garrafas de 13Ks, y, de 45 Ks 9 tubos. Tenemos un caso real de un distribuidor de Riogas Piñeyro en la zona del Cordón. Que no es malo que existan, lo único que se les pide a las empresas es que controlen bien a sus distribuidores porque realmente están siendo afectados en casos los consumidores en el diario vivir. Los consumidores podríamos contribuir mucho a la preservación del medio ambiente y de los recursos naturales, exigiendo no sólo que el producto final sea saludable, sino que los procesos de producción, comercialización y almacenamiento no contaminen el ambiente ni desperdicien los recursos. El mecanismo de mercado, por medio del cual, los consumidores demuestran sus preferencias respecto ala cantidad y calidad de bienes y servicios que complacen sus necesidades comienza a implicarse en la protección del medio ambiente. Podemos contribuir con el medio ambiente, economizando el agua, cerrando el grifo cuando nos lavamos los dientes o regar sin manguera. Otra forma de contribuir con el medio ambiente es reutilizando o reciclando, esto contribuye a una menor producción de residuos y menos consumo de materia prima. Por ejemplo, el tratamiento de las aguas residuales, cada industria o servicio debería retornar descontaminada el agua que utiliza. También es necesaria una clasificación de los residuos, lo cual podríamos hacer desde el hogar, la oficina, la industria, separando lo que todavía puede ser útil mediante el reciclaje.En síntesis, además de exigir un buen producto o servicio, deberíamos velar por que no se abuse de los recursos naturales y no se deteriore el medio ambiente. Por ejemplo, no comprar pollos de una granja que contamina. No subirse a un ómnibus ruidoso, a un taxi que suene la bocina sin necesidad. Hacer uso racional de insecticidas, abonos, artículos de cuero, madera, cuyas industrias, además de contaminar, arrasan con los recursos naturales. Las empresa a "aprovechar la coyuntura mundial" para cambiar su modelo de negocio hacia otro más sostenible y a comprometerse a reducir su impacto medioambiental "de verdad". "Es importante que los datos que se den en una publicidad de este tipo sean veraces y la información transparente. Hoy que "los consumidores tienen cierta fatiga de mensajes verdes" falsos. Es necesario tomar conciencia que, el planeta, "no puede aguantar" el ritmo de consumo actual, por lo que "si se quiere salir de esa ecuación, es necesario que los productos tengan muchísimo menor impacto ambiental". En el Principio 15 de la Declaración de Río sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo (aprobada con ocasión de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo de 1992) se establece lo siguiente: «Con el fin de proteger el medio ambiente, los estados deberán aplicar ampliamente el criterio de precaución conforme a sus capacidades. Cuando haya peligro de daño grave o irreversible, la falta de certeza científica absoluta no deberá utilizarse como razón para postergar la adopción de medidas eficaces en función de los costos para impedir la degradación del medio ambiente.» Es necesario menos ruido y más descanso, es un derecho que tenemos, la seguridad alimentaria, los residuos de envases, contaminación causada por los automóviles, ómnibus, etc. Uruguay necesita fortalecer las capacidades en el país para la conservación de la biodiversidad, la mitigación y adaptación al cambio climático, la generación de energías alternativas, y el manejo y reducción de contaminantes. No nos olvidemos de la contaminación acústica, que tiene consecuencias nocivas para la salud, en zonas urbanizadas, inmediaciones de centros escolares, de hospitales, y de otros lugares vulnerables al ruido. Debe realizarse una evaluación y gestión del ruido ambiental, que consiste en evitar, prevenir o reducir los efectos nocivos de la exposición al ruido. Tener claro para los consumidores los etiquetados de los organismos modificados genéticamente. Un etiquetado claro que permitiera a los consumidores decidir con fundamento si desean consumir de esos productos. Responsabilidad ambiental: quien contamina el medio ambiente debe sanearlo, se quiere decir que necesitamos una normativa de medio ambiente más dura, que quien causa daños tiene que repararlos.Es importante señalar el deber que tienen los gobiernos de proteger a los consumidores. Uno de los más importantes acuerdos se relaciona con la aprobación de una cláusula sobre el medio ambiente y los consumidores, “un tema clave en la estrategia de Consumers International”, dijo Sadie Homer experta de CI. El acuerdo reconoce la relevancia del principio de precaución tanto para temas medioambientales como del consumidor, admitiendo la necesidad de proteger a la población de los posibles riesgos que ciertos bienes o servicios pueden entrañar para ellos y el medio ambiente. Pero también se debe de destacar que debe haber una necesidad mayor conciencia ambiental entre consumidores. Los consumidores de hoy exigen a los países desarrollados -y cada vez más a los en vía de desarrollo-, tener en cuenta los controles necesarios para asegurar la seguridad ambiental., además de los controles comerciales. Algunas de las decisiones de los consumidores están más en sus manos y otras más en el entorno donde uno vive. Se oye hablar mucho de que queremos ser más medio ambientales y sostenibles y es fácil dejar estas cosas en otras manos, del gobierno, de las empresas, de las comunidades. No obstante, las decisiones diarias de uno mismo impactan de forma muy importante a cómo va el total. Debemos continuar en este camino a diario.El empleo de mensajes asociados a valores ecológicos y al cuidado del medio ambiente en la publicidad comercial genera confusión y provoca contradicciones en el consumidor. Es una de la principales conclusiones del informe “Publicidad y medio ambiente” del que es autor Manuel Castañón, abogado de Pronatura, especializado en derecho ambiental. Castañón indica en este estudio que “las fórmulas de expresión a las que se ha recurrido representan fórmulas genéricas que, en algunos casos, pueden inducir a error por cuanto crea en el consumidor y usuario una expectativa de protección ambiental que no existe o no es exactamente la esperada”. “Una mala utilización de los mensajes no sólo constituiría un atentado contra los consumidores y usuarios que pudieran verse inducidos a error con la captación de los mismos sino que también atentarían contra el medio ambiente de forma directa e indirecta”, añade Por lo que se refiere a las actividades financieras “el cambio climático está produciendo importantes desarreglos ambientales y puede llegar a producir en un futuro otros de igual o mayor gravedad, no es menos cierto que para contrarrestarlo es necesario adoptar estrategias que van más allá de una posible inversión en fondos”.El informe concluye que “el hecho de que un consumidor pueda sentirse engañado tiene importantes consecuencias, entre la que cabe destacar, el hecho de que finalmente llegue a la conclusión de que la protección por el medio ambiente no es más que una estrategia comercial y que realmente no se está haciendo nada por favorecer la mejora ambiental”.Vaya el saludo fraterno deseándoles la mayor de las venturas para el próximo año porque si hablamos de encantos, la Navidad esta llena de hermosos sentimientos, donde llegan las palabras emocionadas llenas de buenos augurios, y, Dios a de querer que nos volvamos a encontrar en el próximo año.
Lic. Dra.Adriana Besso